Hay que ser muy fan. A veces ni tanto vale para afrontar dobles trabajos y esfuerzos. A veces forzar la maquinaria es el resultado de un choque excesivo y casi un siniestro total. The Wave Pictures son unos supervivientes por definición. Pertenecen a ese mundo apartado del comercio de bandas indie por etiqueta que vienen y van para siempre. Calaron aquí por su buen hábito a la hora de hacer directos y por un trabajo tan bueno como ‘Instant Coffee Baby‘ (Little Teddy, 2008) y desde entonces han tenido innumerables visitas y excelentes críticas.
Desde ese momento y hasta hoy, la banda británica ha respondido con un álbum por temporada, haciéndoles habituales y despejando la curiosidad y necesidad de verles tocar. Este 2013 no lo dejan pasar y llegan con ‘City Forgiveness‘ (Moshi Moshi, 2013), un álbum doble cargado con armas ya presentadas y que poco tiene que decir. Los que gusten de las melodías de los ingleses, disfrutarán de canciones cargadas de solos de guitarra y el deje melancólico de la voz de David Tattersall, los que vengan buscando más se encontrarán con una pequeña gran decepción de veinte canciones que no mejora lo escuchado. El tedio puede acabar por inundar un trabajo excesivamente largo.
Lo mejor que ofrece ‘City Forgivenesss‘, inspirado en una gira por EE.UU., es que han logrado adaptarse perfectamente a un mensaje de pop de seis cuerdas con fuentes del blues. La guitarra sucia de ‘All My Friends’, los solos de ‘Better to Be Loved’ y ‘Lisbon’ o el ambiente de pequeño garito al que induce el pesado ritmo de ‘Tropic’ hace que vuelva a picar el gusano de verles en directo, que es al final donde The Wave Pictures tienen cátedra. El álbum no es más que una excusa.